El triángulo de la seguridad en tu vehículo
En esta ocasión vamos a centrarnos en una de las zonas de nuestros vehículos que a nuestro criterio son más importantes. Y es que cuando en Iteco Ingenieros realizamos una reconstrucción de accidentes de tráfico, un elevado porcentaje de siniestros se debe en parte a este triángulo: Neumáticos, amortiguadores y frenos.
Del mantenimiento y el estado de estos elementos depende en buena medida la seguridad al volante, ya que son indispensables dentro de una conducción segura. Sin embargo, tras un estudio elaborado por una conocida marca de talleres en casi 900 automóviles, en torno al 40% de los vehículos españoles tienen deficiencias en este peculiar triángulo.
Los neumáticos
Poco que decir de la función de los neumáticos cuando son el único punto de contacto entre el vehículo y la calzada. Un neumático desgastado puede llegar a perder su adherencia hasta un 80%, sobra imaginar si a este porcentaje añadimos condiciones climatológicas adversas u otros factores como el exceso de velocidad.
Los neumáticos se han de cambiar cuando la profundidad de sus hendiduras sea menor a 3 mm o cuando presenten desperfectos tales como grietas o bultos.
Según el estudio, sólo el 21% de los vehículos tienen sus ruedas en perfecto estado, siendo muy llamativo el 37% que necesita un cambio urgente. Los neumáticos son, sin duda, la asignatura donde peor nota sacan los vehículos españoles a la hora de sufrir accidentes de tráfico.
Los amortiguadores
Los amortiguadores son los encargados de que el coche circule fijado a la carretera. Con estas piezas en mal estado se hace notablemente más difícil mantener el control y la estabilidad del vehículo, aumentando entre otros factores clave en accidentes, la distancia de frenado.
Se recomienda revisar los amortiguadores en torno a unos 20.000 kilómetros, siendo necesaria su sustitución al llegar a la horquilla de entre 65.000 y 90.000 kilómetros, ya dependiendo del uso y del vehículo.
Según el estudio del que nos servimos, uno de cada cuatro conductores españoles deberían ir planteando sustituir sus amortiguadores, junto a un 7% que debería considerarlo una prioridad.
Los frenos
Poco hay que explicar de los frenos y su función en la conducción. En su funcionamiento entran en juego varios elementos de los que resaltamos dos piezas primordiales: Las pastillas y los discos de freno.
La sustitución de las pastillas de freno debe acometerse cuando se alcanzan los 60.000 kilómetros, mientras que la de los discos de frenada llega a los 80.000 kilómetros. En nuestro blog, ya hablamos sobre el mantenimiento de los frenos en otra ocasión.
Aunque los datos que se extraen del estudio son más positivos en los dispositivos de frenada, no hay que bajar la guardia y concienciar a la población ante ese 25% de vehículos cuya distancia de frenada se ve multiplicada debido a las malas condiciones de pastillas y discos.